La prednisona se usa sola o con otros medicamentos para tratar los
síntomas producidos por el bajo nivel de corticosteroides (falta de
ciertas sustancias que en general son producidas por el cuerpo y que son
necesarias para su normal funcionamiento). La prednisona también se usa
para tratar otras condiciones en los pacientes con niveles normales de
corticosteroides. Estas condiciones incluyen ciertos tipos de artritis;
reacciones alérgicas graves; esclerosis múltiple (una enfermedad en la
que los nervios no funcionan adecuadamente); lupus (una enfermedad en la
que el cuerpo ataca sus propios órganos); y ciertas condiciones que
afectan los pulmones, piel, ojos, riñones, sangre, tiroides, estómago e
intestinos. La prednisona también a veces se usa para tratar los
síntomas de ciertos tipos de cáncer. Pertenece a una clase de
medicamentos llamados corticosteroides. Funciona en el tratamiento de
los pacientes con bajos niveles de corticosteroides mediante el
reemplazo de los esteroides que el cuerpo produce normalmente. Actúa
para tratar otras condiciones al reducir la hinchazón y el
enrojecimiento, y al cambiar la manera en la que funciona el sistema
inmunitario.
Índice de contenido
Grupo
¿Qué es?
¿Para qué se utiliza?
¿Cómo se utiliza?
¿Qué precauciones deben tenerse?
¿Cuándo no debe utilizarse?
¿Puede afectar a otros medicamentos?
¿Qué problemas pueden producirse con su empleo?
¿Puede utilizarse durante el embarazo o la lactancia?
¿Necesita receta médica?
¿Cómo se conserva?
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Última revisión: martes, 15 noviembre 2011
Clínica Universidad de Navarra
Conviene tomar los comprimidos de prednisona junto con un vaso de agua, durante o inmediatamente después de las comidas.
Evite el contacto cercano con personas que presenten varicela o sarampión.
Grupo
Corticoides, corticoides sistémicos.
¿Qué es?
La prednisona es un medicamento que pertenece al grupo de los medicamentoscorticoides
o corticosterioides. Los corticosteroides son unas hormonas producidas
por nuestro organismo que realizan diversas funciones de gran
importancia.
La prednisona se emplea para tratar los síntomas producidos por un
brusco descenso de los niveles de corticoides en el organismo, por
ejemplo en la enfermedad de Addison. También presenta un gran poder
antiinflamatorio. En ocasiones, por distintos estímulos, algunas
células de nuestro organismo liberan unas sustancias que provocan
inflamación. Los corticoides al reducir la liberación de estas
sustancias ante, por ejemplo, respuestas alérgicas o inmunes, reducen a
su vez la inflamación. Por tanto, la prednisona será útil en
enfermedades que se caracterizan por una inflamación excesiva.
¿Para qué se utiliza?
Insuficiencia adrenocortical o insuficiencia de corticoides en
el organismo primaria o secundaria (como la enfermedad de Addison).
Situaciones de shock provocadas por una hemorragia, un traumatismo o una infección grave.
Alergias graves que no responden a otros tratamientos.
Asma.
Enfermedades reumáticas.
Periodos críticos de colitis ulcerosa.
Cáncer: tratamiento paliativo en leucemias y linfomas.
Problemas de la piel (dermatitis exfoliativa, urticaria, eritema multiforme, psoriasis grave).
Debido a la amplitud de sus efectos la prednisona puede ser
utilizada en otro tipo de indicaciones que su médico juzgue oportuno.
¿Cómo se utiliza?
En España prednisona existe comercializada para su administración oral en forma de comprimidos.
La dosis adecuada de prednisona puede ser diferente para cada
paciente. Ésta depende de la edad, de la patología que se desea tratar,
de la gravedad de la misma y de la situación del paciente. A
continuación se indican las dosis más frecuentemente recomendadas de
prednisona. Pero si su médico le indicado otra dosis distinta, no la
cambie sin consultar con él o con su farmacéutico.
Dosis oral en adultos:
Inicialmente de 20 a 60 mg al día. La dosis de mantenimiento suele ser de 5 a 10 mg al día.
Dosis oral en niños:
De 0,05 a 2 mg por kg de peso al día. La dosis de mantenimiento suele ser de 0,25 a 0,50 mg por kg de peso al día
Cuando se utiliza como terapia de sustitución en la
insuficiencia adrenocortical la dosis se calculará en función de la
superficie corporal del paciente.
Conviene tomar los comprimidos de prednisona junto con un vaso de agua, durante o inmediatamente después de las comidas.
¿Qué precauciones deben tenerse?
Es importante respetar el horario pautado. Si se le olvida
tomar una dosis tómela tan pronto como sea posible y vuelva a la pauta
habitual. Pero si falta poco tiempo para la próxima dosis no la
duplique y continúe tomando el medicamento como se le ha indicado.
Evite la suspensión brusca del tratamiento, sobre todo en
tratamientos prolongados, ya que puede aparecer un síndrome de retirada
de corticoides caracterizado por malestar general, debilidad y dolor
muscular, dificultad para respirar, anorexia, náuseas, vómitos, fiebre,
descenso de la tensión arterial y del nivel de glucosa en sangre.
Si está previsto que su tratamiento con prednisona sea largo puede
ser conveniente que le realicen algunos análisis de manera periódica,
que siga una dieta pobre en sal y/o rica en potasio, vigile las
calorías de la dieta para evitar ganar peso, acuda al oftalmólogo para
revisar su vista periódicamente y lleve siempre con usted alguna
identificación en la que figure que toma corticoides.
Informe a su médico de que está en tratamiento con corticoides si
le van a realizar una prueba cutánea, una intervención quirúrgica
(incluyendo dental) o un tratamiento de emergencia y si contrae una
infección grave.
Evite el contacto cercano (esto es especialmente importante para
los niños) con personas que presenten varicela o sarampión. Avise a su
médico rápidamente si cree que puede tener riesgo de haberse contagiado
con el virus del sarampión o de la varicela.
Mientras reciba corticoides y durante un tiempo después de terminar
su tratamiento no se vacune sin el consentimiento de su médico.
Durante ese tiempo vigile también que nadie que viva con usted reciba
la vacuna oral contra el virus de la polio y evite el contacto en el
colegio o en el trabajo con personas que hayan recibido esta vacuna
recientemente.
Si usted es diabético debe conocer que la prednisona puede alterar
los niveles de azúcar en sangre. Si observa algún cambio de estos
niveles, comuníquelo a su médico.
La prednisona debe administrarse con especial precaución en caso de
padecer alguna de las siguientes enfermedades: colitis, enfermedad de
los huesos, úlcera de estómago o de intestino, diabetes mellitus,
infección, cirugía reciente, enfermedad cardiaca, piedras en el riñón,
enfermedad del hígado o del riñón, glaucoma, colesterol elevado,
hipertensión arterial, problemas de tiroides, tuberculosis, lupus
eritematoso sistémico o miastenia gravis.
En niños y ancianos se recomienda el uso de prednisona con precaución en tratamientos prolongados.
La prednisona es una sustancia prohibida en el deporte de competición y puede dar positivo en el control de dopaje.
Si los síntomas de su enfermedad no mejoran o empeoran avise a su médico.
¿Cuándo no debe utilizarse?
En caso de alergia a este medicamento. Si experimenta algún
tipo de reacción alérgica deje de tomar el medicamento y avise a su
médico o farmacéutico inmediatamente.
¿Puede afectar a otros medicamentos?
Los corticoides pueden afectar a un buen número de
medicamentos, por lo que es conveniente que informe a su médico o
farmacéutico de cualquier otro medicamento que esté tomando.
Algunos medicamentos que interaccionan con prednisona son:
antiácidos (administrados en cantidades importantes), antiepilépticos
(carbamacepina, fenitoína), ciclosporina, teofilina, rifampicina,
isoniazida, antidiabéticos orales (glibenclamida, metformina),
salicilatos (ácido acetilsalicílico, diflunisal), indometacina,
diuréticos eliminadores de potasio (clortalidona, hidroclorotiazida),
resinas de intercambio iónico (colestiramina, colestipol), ketoconazol,
vacunas y toxoides.
Deberá controlarse la administración conjunta de prednisona y antibióticos en general.
¿Qué problemas pueden producirse con su empleo?
Este medicamento puede alterar los resultados de los análisis
de colesterol, glucosa, calcio, potasio y hormonas tiroideas en sangre,
de glucosa en orina y las pruebas cutáneas de la tuberculina. Por lo
que si le van a realizar un análisis de este tipo avise que está
recibiendo este medicamento.
Los efectos adversos de este medicamento son, en general, leves,
siendo más frecuentes con dosis altas y en tratamientos prolongados.
Ocasionalmente pueden producir: aumento de apetito, indigestión,
fragilidad ósea, aumento de los niveles de glucemia, propensión a las
infecciones y retraso en la cicatrización de heridas.
Raramente puede producir otros efectos adversos como hipertensión,
retención de líquidos, sudoración, disminución del potasio en sangre y
alteraciones en la menstruación, entre otros.
Consulte a su médico si advierte algo anormal.
¿Puede utilizarse durante el embarazo o la lactancia?
No se han realizado estudios adecuados en mujeres embarazadas.
En los estudios realizados con animales se han detectado problemas en
el feto. Por ello, únicamente se acepta el empleo de prednisona en
embarazadas en condiciones terapéuticas en las que resulte
indispensable.
La prednisona se excreta en pequeñas cantidades en la leche materna. En general, se acepta su uso durante la lactancia materna.
¿Necesita receta médica?
Sí.
¿Cómo se conserva?
Mantener el medicamento en un lugar fresco, sin humedad, lejos de fuentes de calor y luz directa.