Fíjate en el color. El color adecuado de la materia fecal es
un marrón intermedio parecido al color de una bolsa de papel marrón. Si
presenta un color rojizo, amarillento, blancuzco o verdoso, hazla
analizar por tu médico. En la mayoría de los casos indica que algo falta
en tu dieta, pero también puede ser una señal de algo más serio. (ver
Recursos para mayor información.)