La anemia es una de las complicaciones más
comunes de la enfermedad inflamatoria intestinal. La alta frecuencia de
valores bajos de hemoglobina en estos enfermos provoca en muchas
ocasiones una infravaloración por parte del médico de esta
circunstancia, lo que se traduce en la falta de un tratamiento eficaz.
Por otro lado, el carácter complejo de los mecanismos de producción de
la anemia en la enfermedad inflamatoria intestinal con frecuencia
plantea dudas acerca del tratamiento más adecuado. La identificación
correcta de los pacientes con anemia así como la instauración del
tratamiento más idóneo serán los dos pilares fundamentales para la
mejoría de la calidad de vida de los enfermos. El uso correcto de los
suplementos de hierro y las nuevas formulaciones de hierro parenteral,
con o sin eritropoyetina asociada, han revolucionado nuestro abordaje de
esta complicación evolutiva de la enfermedad inflamatoria intestinal.